Autora: Lic. María del Pilar Patiño Alejandro
Simbólicamente al corazón se le ha relacionado con sentimientos o emociones que representan básicamente valor, fuerza, sufrimiento, afecto o amor; es común que se le represente en una figura plana, la cual está lejos de ser la imagen anatómica real. Los indicios históricos hacen alusión a que esta figura representativa del corazón aparece desde la prehistoria, aunque su significado va cambiando con el paso de los siglos, al parecer es hasta la Edad Media que se empieza a relacionar con los sentimientos. Lo cierto es que el corazón es y será un órgano tan importante y relevante, visto desde los diferentes enfoques.
Para el área de la salud, el corazón toma relevancia por el perfil epidemiológico actual a nivel mundial; así, desde el año 2000 la Federación Mundial del Corazón designan el 29 de septiembre como el Día Mundial del Corazón. La intención es recordar año con año la importancia de adoptar hábitos sanos para disminuir los daños progresivos al
corazón.
En los centros hospitalarios con la especialidad de Cardiología se adquiere una gran responsabilidad para atender la alta demanda de la población afectada por dichos problemas. Los usuarios de estos servicios esperan recibir una atención óptima que cubra sus expectativas y, por ende, con un alto sentido humano, por consiguiente, debe haber congruencia de lo que se espera con lo que se ofrece en los servicios de salud, independientemente de la especialidad.
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