Autor: Dr. Ángel Romero Cárdenas
Ya que está usted aquí, aproveche y llévese varias…, le van a servir mucho… Escoja las
que le gusten, las que le agraden y sobre todo…, las que necesite… Tarde o temprano, va a
utilizarlas todas. Toda la gente que entra en este bazar se lleva varias piezas. Puede preguntar
sin compromiso… Estamos para servirle… Contamos con servicio de apartado…
– ¡Mire ésta…!
-Cada persona que cruza por esa puerta se lleva una. Les hace verse atractivos, seductores,
hermosos… Es el modelo Vanidad…
-Pero yo no tengo nada atractivo, seductor ni hermoso…
-Esto es lo que usted cree…, con una de éstas, nadie podrá opinar lo contrario… Le verán
y, automáticamente, será su admiración… Contémplese, admírese… Disfrútese… En todas las
paredes hay espejos. Recuerde que mientras más consuma, obtendrá mejor precio…
– ¿Y esa otra?
-Esa está hecha para usted… Le queda muy bien, le hace verse mentalmente ágil, brillante,
casi genial. Con esa podrá impactar a sus compañeros de trabajo y créame…, no dudarán ni
un ápice de su inteligencia.
-De veras… Me hace ver inteligente… Pero… ¿podrá hacerme sentir inteligente?
-Desde luego, estas prendas han sido diseñadas, precisamente para complacer al consumidor más exigente… Tienen garantía limitada… Tome usted en cuenta que los fabricantes
prometen: “Satisfacción sin límites… o la duplicación de su dinero” … Aunque aplican restricciones…
-Ésta me gusta… Pero, me queda demasiado grande…
-Le queda muuuy bien… Además, así se usan ahora… La gente necesita sentirse holgada,
que nada le oprima y que pueda experimentar la libertad de moverse… Necesita sentirse en
equilibrio con el Cosmos… Ponerse una de éstas, le hace verse Feliz. La gente lo verá como
alguien alegre, jovial y contento… Hasta podrían pensar que usted realmente es así. Si en su
vida real, privan o dominan las penas, las desdichas y el sufrimiento, ¡qué importa…! Si su
vida es rutinaria y está llena de miserias, ¡qué importa…! Para todos usted será el colmo de
la armonía y de la felicidad… Cómprela, antes de que se termine… Está de moda… De este
modelo se están vendiendo muchas…
– ¡Aquella parece muy interesante!
-Ésa la tenemos aparte porque es verdaderamente tan espectacular como compleja. Cuando
usted la porta, se distorsiona su imagen en forma tal, que sus cualidades se acentúan y sus
defectos… también… La gente lo verá como una persona encantadora, carismática, interesante,
inteligente, con belleza, talento y porte fuera de este mundo… Podrá usted rascarse la cabeza
o picarse la nariz y no pasará nada… Podrá usar calcetines de colores distintos e implantará
una nueva moda… O bien, le verán como un ente: ególatra, pedante, envidioso, petulante,
mentiroso, débil y miedoso… Desde luego, puede ser que, sin proponérselo, le perciban como
realmente es usted… Como nunca quisiera que lo vieran… Uno de los inconvenientes que tiene
esta prenda… es que, mientras la gente le aprecie, será benevolente y todo lo que usted diga
o haga estará bien… Pero, si hubiera el más pequeño desacuerdo…, eso sería suficiente para
precipitarlos en una avalancha de incompatibilidades, de desatinos y, sobre todo… sobre
todo…, de desamor. Tenga mucho cuidado con lo que elige… Los fabricantes garantizan efectos
irreversibles, irremediables e impredecibles…
– ¿Y aquélla, que está tan lejana, aislada y solitaria…, casi escondida?
-Ésta es, sin duda, una de las más útiles. Cuando se la ponga, todo el mundo le creerá…,
todos aceptarán que dice la Verdad… A nadie le importará que todo lo que usted diga sea
mentira…, los dejará convencidos… Ésta es la que más se vende… Ésta es la que sostiene el
negocio…
– ¡Jamás creí que entrar en un Bazar de máscaras, pudiera resultar tan provechoso!
-Por cierto, una pequeña observación, esta máscara: es la más costosa… No está garantizada…. Es extremadamente frágil y… tiene fecha de caducidad…
Te invitamos a encontrar el texto en la Edición de Motu Cordis, página 19