La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niños menores de 5 años de la comunidad no usen mascarillas como medida preventiva contra el COVID-19 en una guía reciente sobre el uso de mascarillas. Si los países utilizan un límite de edad de 2 o 3 años para recomendar máscaras, los adultos deben supervisar directamente a los niños para garantizar el cumplimiento, especialmente cuando se espera que las máscaras se usen durante períodos más prolongados.
La OMS también señala que los protectores faciales solo brindan protección para los ojos “y no deben considerarse como un equivalente a las máscaras con respecto a la protección contra las gotas respiratorias y / o el control de la fuente”.
Un grupo de expertos internacional y multidisciplinario reunido por la OMS examinó la evidencia sobre la enfermedad y la transmisión del COVID-19 en niños y la evidencia limitada disponible sobre el uso de máscaras por parte de los niños.
- Si hay transmisión generalizada en el área donde reside el niño.
- La capacidad del niño para usar una máscara de manera segura y adecuada.
- Acceso a máscaras, así como lavado y reemplazo de máscaras en ciertos entornos (como escuelas y servicios de cuidado infantil).
- Supervisión adecuada por parte de un adulto e instrucciones para el niño sobre cómo ponerse, quitarse y usar máscaras de forma segura.
Los niños que gozan de buena salud en general pueden usar una mascarilla no médica o de tela, el adulto que proporciona la máscara debe asegurarse que sea del tamaño correcto y cubra la nariz, la boca y la barbilla del niño.
Los niños con afecciones de salud subyacentes, como fibrosis quística, cáncer o inmunosupresión, deben usar una máscara médica. Una mascarilla médica controla la propagación del virus y la protección al usuario, y se recomienda para cualquier persona que tenga un mayor riesgo de enfermarse gravemente por COVID-19.
¿Los niños deben usar una máscara cuando practican deportes o realizan actividades físicas?
Los niños no deben usar una máscara cuando practiquen deportes o realicen actividades físicas, como correr, saltar o jugar en el patio de recreo, para que no comprometa su respiración. Al organizar estas actividades para niños, es importante fomentar todas las demás medidas críticas de salud pública: mantener al menos 1 metro de distancia de los demás, limitar el número de niños que juegan juntos, proporcionar acceso a instalaciones de higiene de manos y fomentar su uso.
En el contexto de COVID-19, es posible que algunos niños no puedan usar una máscara debido a discapacidades o situaciones específicas, en estos casos, los protectores faciales pueden considerarse una alternativa a las máscaras, pero no brindan la protección equivalente para evitar que el virus se transmita a otras personas. Si se toma la decisión de usar un protector facial, debe cubrir todo el rostro, envolver los lados del rostro y extenderse hasta debajo del mentón.