Las vacunas son una herramientas muy importante para la prevención de enfermedades. Hace muchos años, cuando no existían las vacunas, algunas enfermedades producían miles de muertes por año. Un hito en la salud pública mundial fue la erradicación de la viruela en 1980.
Las vacunas se utilizan para reforzar el sistema inmunitario y prevenir enfermedades.
Durante unas semanas después del nacimiento, los bebés tienen algo de protección contra los microbios que les causan enfermedades. Esta protección se transmite de la madre a través de la placenta antes del nacimiento. Después de un corto tiempo, esta protección natural desaparece.
Las vacunas ayudan a proteger contra muchas enfermedades que solían ser mucho más comunes, algunos ejemplos incluyen tétanos, difteria, paperas, sarampión, tos ferina (tos convulsiva), meningitis y poliomielitis. Muchas de estas infecciones pueden causar enfermedades serias o potencialmente mortales, e incluso pueden llevar discapacidades de por vida.
Los beneficios de la vacunación:
- Salva vidas cada año.
- Ayuda a combatir enfermedades, haciendo posible su control, eliminación y hasta incluso su erradicación.
- Vacunarse es un acto de solidaridad, te protege a ti y nos protege a todos.
- Forma parte de un estilo de vida saludable.
Es importante recibir todas las vacunas que correspondan según la edad y el calendario de vacunación.