La repercusión que ha tenido la técnica de un pediatra californiano para apaciguar el llanto de un bebé, que consiste en colocar al niño mirando hacia el suelo en un ángulo de 45º y mecerlo suavemente hacia arriba y abajo, muestra la preocupación y desconcierto que sienten muchos padres, sobre todo los primerizos, cuando no pueden calmar a un bebé que llora desconsoladamente.
Para él el éxito de cualquier técnica depende de la forma de cogerle y la tranquilidad del adulto que acude a consolar al pequeño.
Algunas pautas son:
- Aumentar el contacto físico, en contra de la creencia popular que cargar mucho al niño es malcriarlo, la mayoría de especialistas desmienten que dejar llorar al niño desconsoladamente sea la mejor opción.
- Mecerle suavemente, Robert C. Hamilton, al igual que Feenstra, opinan que los movimientos rítmicos tienen un efecto calmante sobre el bebé ya que le recuerdan a su vida en el útero.
- Arrullarlo, ya que el pequeño siente una sensación de contención y protección parecida a cuando estaba en el interior de su madre, también evita que se despierte por sus propios movimientos incontrolados.