Una de cada tres mujeres ha sido víctima de abuso en su vida. Se ha demostrado que en situaciones de crisis humanitarias, catástrofes climáticas, pandemias y conflictos estas cifras se incrementan.
En el año 2000 la Asamblea General de la ONU designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, invitando a gobiernos, organizaciones internacionales y ONG’s a involucrarse y coordinar acciones que eleven la conciencia pública para eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres.
La fecha de este Día Internacional de la Violencia contra la Mujer fue elegida para honrar la memoria de las hermanas Mirabal, tres activistas políticas de la República Dominicana que fueron brutalmente asesinadas en 1960, por orden del dictador dominicano Rafael Trujillo.
La violencia contra las mujeres y niñas se manifiesta de forma física, sexual y psicológica, e incluye los siguientes supuestos:
- Violencia por parte de un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, feminicidio).
- Violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético).
- Trata de seres humanos (esclavitud, explotación sexual).
- Mutilación genital femenina.
- Matrimonio infantil.
En el año 2009 ONU Mujeres lanzó la campaña “DI NO. ÚNETE”, designando el 25 de cada mes como Día Naranja. Con esta iniciativa se pretendió movilizar a la sociedad civil y a los gobiernos, para que juntos ampliaran el impacto de la campaña.
Se animó a los participantes a que llevaran puesta una prenda de vestir de color naranja para mostrar solidaridad con la campaña.
La población femenina es altamente vulnerable de sufrir violencia de género.