Autor: Dr. Mauricio López Meneses
Coordinador de Educación Médica Continua
Desde la fundación del Instituto Nacional de Cardiología, en 1944, los pilares fundamentales que planteó el maestro Ignacio Chávez las tres actividades sustantivas de nuestra institución: la asistencia, la investigación y la docencia.
La escuela de cardiología del Instituto tiene un merecido reconocimiento mundial por haber dejado enseñanzas muy valiosas e investigación de gran trascendencia en cardiología clínica, cardiología pediátrica, cirugía cardiotorácica y disciplinas afines a ella como: Fisiología, Patología, Bioquímica, Embriología, Electrocardiografía, Nefrología, Reumatología, Cardiopulmonar y Hematología, entre otras.
El Instituto ha evolucionado en concordancia con el avance de la ciencia y de la evolución de la sociedad. La educación se ha transformado, incorporando nuevas técnicas y dinámicas de aprendizaje, tecnologías digitales de información y simulación médica, que sin descuidar las bases clínicas facilitan y potencian el aprendizaje.
Sin duda la pandemia que estamos viviendo nos ha obligado a adaptarnos rápidamente a la nueva circunstancia y asumir el reto de que la enseñanza se adapte a las necesidades actuales, conserve su calidad y se logren los conocimientos y competencias necesarias en todos los niveles de enseñanza.
Te invitamos a seguir leyendo en la página 12 de Motu Cordis.