Autor: Dr. Jorge Gaspar H.
En 1934, el pintor Jorge Enciso tuvo el alto honor de haber elaborado el escudo nacional mexicano por encargo presidencial. Diez años después, el maestro Chávez le encomendó el diseño del escudo que habría de representar al Instituto Nacional de Cardiología.
El valor intrínseco de este escudo radica en la precisión con que simboliza el propósito humanitario y académico de nuestra organización. Además, la reconocida belleza de este emblema se debe a la elegante sencillez de su dibujo, la simetría de sus proporciones y la armonía de los elementos que lo componen. Siendo que el propósito del INC es inmutable, su emblema debe ser intemporal.
Desafortunadamente, a lo largo del tiempo, el escudo ha sido reproducido con una serie de modificaciones que, además de alterar su belleza original, ha dado lugar a la coexistencia de varias versiones del escudo que se emplean de manera indiscriminada.
Por esta razón, se consideró necesario establecer un solo escudo oficial y reglamentar su uso. Para su elaboración se contrató a una compañía especializada en el diseño de logos con tecnología moderna.
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