El paciente que se encuentra por diferentes motivos obligado a permanecer inmóvil en la cama, es necesario asistirlo en actividades de autocuidado y de la vida cotidiana como: el baño, higiene personal, vestido, alimentación, cuidado del cuerpo, etc.
Es importante prevenir que presente:
- Alteraciones en la circulación sanguínea que desembocan en problemas como trombosis venosa.
- Mala ventilación pulmonar con retención de secreciones y predisposición a las infecciones respiratorias (neumonía).
- Pérdida de masa muscular, generando una atrofia y debilidad muscular.
- Rigidez articular.
- Aparición de lesiones en la piel, cuya profundidad puede variar desde una erosión superficial hasta una afectación más profunda, con riesgo de llegar hasta el hueso.
Recomendaciones de cuidado
- El aseo corporal alivia el dolor, la rigidez articular, y reduce molestias como el prurito o comezón, ocasionado por la piel seca, se debe limpiar con una esponja sumergida en agua tibia jabonosa. El jabón debe ser de pH neutro, de lo contrario favorecerá la resequedad de la piel.
- Lo ideal es que la cama se haga una vez al día como mínimo, que esté bien estirada para evitar arrugas, y por supuesto, cada vez que se manchen las sábanas, hay que cambiarlas. Para el caso de los pacientes incontinentes se recomienda colocar una sábana impermeable o algún material de plástico.
- Lavar la nariz instilando unas gotas de agua con sal o con una gasa impregnada en suero salino. Debe cambiarse de gasa para cada fosa nasal.
- El lavado de la boca debe hacerse diariamente con suavidad, aun cuando el paciente se alimente por otra vía diferente a la oral. En las personas portadoras de prótesis, retirar las dentaduras y proceder a su limpieza tras cada comida.
- Al alimentar al paciente, se debe colocarlo elevando la cabecera de la cama o colocando almohadas para que apoye la espalda.
- La dieta deber ser variada, rica en proteínas, vitaminas y minerales que faciliten la regeneración de los tejidos. En ocasiones se precisa un aporte nutricional complementario.
- El consumo de líquidos debe ser 1,5 a 2 litros al día como mínimo, salvo que existan contraindicaciones reseñadas por el médico.
- El paciente no debe acostarse inmediatamente después de comer, con el fin de evitar reflujos de jugo gástrico. Solo puede hacerlo, hasta pasados 30 minutos después de la ingesta.
Autocuidado para el cuidador
- Mantener siempre posturas adecuadas para prevenir lesiones de columna.
- Tener dos o más cuidadores por paciente con el fin de rotar y repartir las cargas.
- Procurar dormir períodos de tiempo adecuados, que permitan el descanso.
Los cuidados dependerán del estado general y mental del enfermo. En general se intenta mantener la capacidad funcional, evitar complicaciones y lograr una buena calidad de vida, con comodidad y afecto.