ARTICULO

EL ADULTO MAYOR A TRAVÉS DE LA HISTORIA

Autor: Dr. Sergio Trevethan Cravioto
Subdirector de la Coordinación de Enseñanza

Conferencia dictada para el Curso de Enfermería Geriátrica:
Complicaciones, rehabilitación y cuidados

Cuando la jefa de Enfermería de la Consulta Externa, mi amiga y compañera de trabajo de casi toda mi vida, Ernestina Pinal, me dio la tarea de hablar del tema del adulto mayor a través de la historia, me pasó con esto uno de los encargos más difíciles que se me han hecho en toda mi vida. Porque hablar de alguien no es muy difícil, pero ahora el tema tiene mucho que ver conmigo mismo y en consecuencia mis reflexiones tienen mucho que ver también con lo avanzado de mi edad.

Sin embargo, quiero que para la audiencia que hoy me asiste le quede claro, que a mi entender no es lo mismo ancianidad que edad avanzada.

Cuando a través de los milenios acontece la mutación del primate en hombre, rey de las especies que habrá de conquistar la conciencia y el logos, dos nociones primordiales le asisten: la del espanto frente al antagonismo del medio primitivo y la admiración de sus bellezas, pronto habrá de percatarse que los individuos que más perduran son los más aptos, los que han vivido más y los que utilizan su memoria para reconocer el peligro. La admiración y respeto por ellos es muy probable que desde entonces haya empezado, prueba de ello es que el hombre de Neanderthal ya enterraba a sus muertos.

El giro del mito al logos en su sentido de perfección emplaza al viejo a una situación de desventaja. Para el griego adorador de la belleza, la vejez con su deterioro inevitable no podía menos que significar una ofensa al espíritu que fue motivo de mofa en su comedia. Tampoco los seres del Olimpo amaron a los ancianos. La probidad espartana con su insistencia en el respeto a los padres ancianos nos hace suponer que no fue muy acatada. Vitrubio habla sobre “la casa de Creso destinada por los sardianos a los habitantes de la ciudad que, por su edad avanzada han adquirido el privilegio de vivir en paz en una comunidad de ancianos a los que llaman Gerusía

Te invitamos a continuar con la lectura en la página 22 d Motu Cordis.

To Top
PersonalTrainerCertification.us