Autora: Lic. Claudia María Ruiz Rabasa
Secretaria del Consejo Directivo de la Fundación Mexicana del Corazón
Para mí es un gran honor hablar de uno de nuestros pilares de la Cardiología, no sólo en México sino también a nivel internacional, en este artículo quiero invitarlos a viajar por la historia de un gran hombre y un excelente cardiólogo, pero para entender su personalidad investigué cuáles son sus raíces y de dónde proviene tanta historia.
El apellido Trevethan proviene del condado no metropolitano de Inglaterra de Cornualles, ocupa un lugar destacado en los registros eclesiásticos de Cornualles desde mediados del siglo XVI. Posiblemente, Trevethan signifique “la ciudad rica o fructífera”. Los Cornwall cuando viajan hacia México arribaron a tierras mineras en busca de metales preciosos como el oro, platino, estaño y plata, lo más importante es que ellos hasta la fecha han conservado sus tradiciones, su cultura, dejando una rica herencia en Hidalgo y en todo México. En cuanto a la gastronomía, los migrantes de Cornualles empezaron a cocinar el cornish pasty (paste córnico), el famoso paste hidalguense.
El apellido Trevethan cuenta con un licor, es un ron destilado de Cornualles, envejecido en barricas de jerez y bourbon y roble virgen de Cornualles durante ocho meses.
Los Cravioto mexicanos, y algunos de los estadounidenses, son descendientes del genovés Simón Cravioto (Simone Craviotto) y la mexicana María de la Luz Pacheco Moreno, quienes contrajeron matrimonio en Huauchinango, Puebla, en 1824.
Te invitamos a continuar con la lectura en la página 28 de Motu Cordis
