Autora: Mtra. María Guadalupe Paredes Balderas
Directora de la Escuela de Enfermería del INC
La formación del talento humano en el área de la salud debe responder a las necesidades de salud de la población mexicana. La escasez de personal calificado se pone de manifiesto como uno de los mayores obstáculos para la eficacia de los sistemas de salud y la calidad en su formación académica es estratégica para el mejor desempeño. Además, el logro de los objetivos en una atención de calidad y las proyecciones sobre el futuro demuestran que los países subdesarrollados tendrán que afrontar una brecha cada vez mayor entre la oferta y la demanda de trabajadores de la salud competentes.
La incorporación de las tecnologías como herramientas didácticas son una tendencia creciente tanto a nivel de pregrado, posgrado y educación continua. Los avances reunidos en los simuladores de alta fidelidad ofrecen nuevas posibilidades de enseñanza-aprendizaje, en tanto incorporan un software que hace factible la construcción de diversos escenarios con un nivel de complejidad gradual y creciente, acorde a las características y necesidades del nivel formativo por el que atraviesan los alumnos. La simulación facilita los procesos de aprendizaje en la práctica clínica y permiten la adquisición de competencias en menor tiempo, además de disminuir los niveles de estrés por tratarse de escenarios simulados. Así, como la posibilidad de replicar un mismo escenario clínico para varios alumnos, y poder evaluar el desempeño de cada uno de ellos, detectar oportunidades de mejora y retroalimentarlos.
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