El grupo sanguíneo AB es el más raro, pues únicamente un 0.06% de la población lo posee. Sin embargo, existe una variante extremadamente rara y valiosa, la conocida como sangre dorada.
Existen hasta ocho combinaciones distintas que pueden hacerse con A, B, O y D + o D-, pero de todos ellos es el grupo sanguíneo AB es el que se encuentra en menor proporción en la sociedad. Según datos de la Escuela de Medicina de Stanford, un 0,6% de la población general tiene esta clase de sangre corriendo por sus venas y aunque los porcentajes varíen según la etnia, nunca llega al 1%.
Sin embargo nos enfocaremos en un tipo más extraño: la sangre dorada, que únicamente tienen menos de medio centenar de personas en el planeta.
Se descubrió a través de un hombre llamado Thomas, cuyo caso salio a la luz en un artículo publicado en la revista Mosaic en 2014, titulado precisamente como “El hombre de la Sangre de Oro”. La característica esencial de esta sangre es que se caracteriza porque carece de todos los antígenos asociados al Rh, esto sucede debido a una mutación en el gen RHAG.
El Rh es una sustancia que se detecta cuando se realiza una prueba de sangre para determinar de qué tipo es. Para esto, es necesario analizar las proteínas (antígenos) que se encuentran en los glóbulos rojos. En algunos casos puede ser Rh positivo, si está presente el antígeno D. En caso contrario, sería Rh negativo.
Encontrar un donante de sangre para las personas con sangre dorada puede ser casi imposible. Esta es la razón por la que las personas que poseen esta “sangre de oro” son alentadas a donar en caso de que alguna vez necesiten sangre.
Una característica importante de los individuos Rh nulo es que sus hematíes (células de la sangre que transportan el oxígeno a los órganos y tejidos) presentan una vida menor, lo cual conduce a diferentes grados de anemia.