El consumo de alcohol, es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos. De hecho, cada año se producen 3,3 millones de muertes en el mundo debido a su consumo nocivo.
La Organización Mundial de la Salud asegura que el consumo de bebidas alcohólicas en reuniones sociales es muy frecuente en muchos lugares del mundo. Este hábito trae consecuencias negativas para salud por sus propiedades tóxicas, debido al etanol que contienen, la ingesta de bebidas alcohólicas tiene una infinidad de consecuencias para nuestro organismo.
Cuando el alcohol llega a la sangre (dependiendo de la persona suele tardar entre 30-90 minutos después de ser ingerido), se produce una disminución importante de azúcares en ella, provocando una sensación de debilidad, agotamiento, mareos, etc.
La acción del alcohol inhibe también una hormona muy importante, la vasopresina, la cual afecta al riñón ya que empieza a fallar y elimina más agua de la que ingiere, provocando que el organismo busque agua en otras estructuras.