Dr. Humberto Rodríguez Reyes
Cardiología, Electrofisiología y Medicina Interna, Instructor de RCP Básica y Avanzada de la Asociación Americana de Corazón (AHA). Presidente Sociedad Cardiovascular y Arritmias (Socaya).
Aguascalientes, México.
Correo: humbertorodriguezr@hotmail.com; Facebook: DrHumberto Rodríguez Reyes; Facebook: Sociedad Cardiovascular y Arritmias (Socaya)
Las personas que han sufrido un paro cardiaco súbito deberán ser llevadas a hospitales o servicios médicos que cuenten con especialistas en terapia intensiva, cardiología, electrofisiología, hemodinámica y cirugía de corazón. El objetivo es establecer la causa del paro cardiaco, para lo cual se requerirán varios estudios. Posteriormente se requerirán medidas de tratamiento específicas con el fin de evitar otro cuadro de paro cardiaco o muerte súbita.
En adultos, muchos de los pacientes serán portadores de cardiopatía isquémica, pueden haber sufrido un infarto de miocardio o tener arterias coronarias ocluidas, por lo que ameritarán un estudio de cateterismo cardiaco para establecer el diagnóstico y tratamiento. Este último puede ser, además de medicamentos, angioplastia coronaria o cirugía de revascularización coronaria, según sea necesario en cada caso.
Otras enfermedades graves que podemos encontrar en víctimas de un paro cardiaco son: daño cardiaco severo como insuficiencia cardiaca, engrosamiento(hipertrofia) o dilatación severa de las paredes del corazón, utilización de medicamentos que predispongan a arritmias graves o ser portadores de insuficiencia renal o daño pulmonar.
Estos pacientes ameritan tratamiento médico especializado para mejorar cada una de sus condiciones, y pueden llegar a requerir terapia con marcapaso con resincronizador y desfibrilador automático implantable.
Consulta más acerca del artículo en la revista de Cardiología y Arritmias de la SOMEEC.